El Chef estadounidense Kwame Onwuachi le aporta una cuota extra de sabor a la programación del Hay Festival Querétaro 2019, a realizarse del 5 al 8 de septiembre
El Chef Onwuachi está pasando por un momento de gloria que se destaca aún más cuando se recuerda que hace medio siglo un individuo con su color de piel no hubiera podido acercarse a ninguno de sus logros.
Quedó en sexto lugar como participante de Top Chef edición California, ha sido nombrado uno de los mejores chefs por la revista Food & Wine, fue homenajeado por la encuesta Zagat y la revista Forbes en la lista 30 Under 30, y acabada de recibir el premio James Beard Rising Star 2019 como chef emergente destacado.
A sus 29 años, Kwame Onwuachi es chef ejecutivo del restaurante Kith/Kin del hotel InterContinental de Washington D.C., donde combina la sazón de su herencia nigeriana y sureña, directamente ligada a las temporadas que pasó en Ibusa, Nigeria y Nuevo Orleans, Luisiana.
La misión culinaria de Onwuachi se plasma claramente en el menú de Kith/Kin, que ofrece platillos de fusión afro-caribeña con alta cocina, que saca a relucir sabores y saberes de las cocinas tradicionales nigeriana, etíope, trinitaria, jamaiquina e incluso mexicana (su reinvención del Huachinango a la veracruzana, bautizado como Calamari Veracruz tiene su lugar en el menú. También el pollo al chile-tamarindo…). Onwuachi está contando la historia de la afrodescendencia norteamericana a través de la comida.
Además de estar a la cabeza de una cocina que ofrece desayuno, almuerzo, cena y room service 24-7, Onwuachi es el creador de la franquicia de comida rápida-casual Philly-Wing Fry, que cuenta con dos sucursales que van en camino a conquistar muchos más puntos sobre el mapa.
El chef se formó en el Culinary Institute of America y pasó por los finos restaurantes Eleven Madison Park y Per Se, sobra decir que tiene una carrera que sólo va en auge. Pero lo cierto es que el chef está cosechando los frutos que sembró en medio de la adversidad.
Kwame se crio en el Bronx en el seno de una familia humilde, por decir lo mínimo. De jovencito supo lo que implica pertenecer a una pandilla, vender droga y ser expulsado a la universidad.
De hecho, su temporada en Nigeria no fue un viaje romántico de regreso a la raíz, fue la solución que encontró su madre cuando no supo qué más hacer con él. Tampoco fue color de rosa su vida en el sur estadounidense, donde trabajó como cocinero –antes de estudiar culinaria– en el barco Deepwater Horizon, encargado de la limpieza del derrame de petróleo en el Golfo de México en el desastre BP de 2010.
Sobre ese barco, Onwuachi experimentó por primera vez la contundencia del racismo, siendo el único negro en la embarcación. Y sus encuentros con el racismo siguieron también en ambientes aparentemente más refinados, es decir, los renombrados Eleven Madison Park y Per Se.
Antes del éxito que ha conocido Kith/Kin, amado por los comensales y por la crítica, Onwuachi fracasó monumentalmente en su proyecto más ambicioso, el restaurante Shaw Bijou, que prometía ser una de las mejores experiencias gastronómicas de Washington pero terminó cerrando con menos de un año de vida. Un restaurante que el chef había comenzado a soñar en los días en que vendía dulces en el metro de Nueva York, para financiar sus estudios.
Sería difícil imaginar todo el éxito que ha disfrutado el chef Onwuachi leyendo su recientemente publicada autobiografía Notes from a Young, Black Chef (2019) en el que Kwame narra la historia de su vida hasta justo antes de que cambiara el juego.
Hoy el chef está próximo a llegar al Hay Festival Querétaro, donde no sólo compartirá su extraordinaria experiencia con el público en conversación con la periodista y escritora argentina Mónica Maristain el sábado 7 de septiembre en la Cineteca, de 16:30 a 17:30 horas, sino que hará un recorrido a las 10 horas del mismo sábado 7 de septiembre por el Mercado Tepetate para encontrarse con los aromas de la comida mexicana y algunos de los sabedores de la gastronomía local.
La visita del chef se dará para interactuar con chefs locales en un intercambio que será enriquecido por la fusión cultural presente en los Estados Unidos, la tradición milenaria de la cocina ancestral mexicana y la herencia africana en la sangre y los intereses culinarios de Onwuachi.
El Hay Festival Querétaro ofrece una vez más, otra manera de imaginar el mundo, esta vez, celebrando la diversidad cultural, el conocimiento y la buena comida.
